La Nave 16 del Matadero Madrid acoge, hasta el 27 de febrero, la muestra El Jardín de las Delícias que incluye una instalación del director artístico Carlus Padrissa de La Fura dels Baus. Padrissa presenta una experiencia visceral diseñada como una obra específica para esta exhibición. Un tríptico de imágenes en movimiento, protagonizadas por 30 performers suspendidos en el aire, se proyecta en una pintura creada in situ para el Matadero Madrid. La banda sonora de la pieza y una plataforma vibratoria que la acompaña multiplican la intensidad de esta obra inmersiva que equipara infierno a locura y presenta la creación como una cadena de ADN formada por cuerpos humanos.